Budapest es un sitio que puede llenarse de turistas. Así que vamos a pensar en planes un tanto alternativos.
No dejes de visitar las cosas que quieras, pero amplia un poco.
Por eso hoy te quiero recomendar una idea que a mi me gusta mucho: visitar la Ópera de Budapest.
Si vas a viajar a Budapest y seas o no amante de la música clásica y los espectáculos de arte no debes dejar de visitar la ópera de la ciudad.
La disfrutarás tanto como evento musical como por la arquitectura del emblemático edificio.
La ópera de Budapest se encuentra ubicada en la Avenida Andrassy, una de las principales de la ciudad y muy difícil perderse.
No solo ofrece espectáculos relacionados con la ópera sino también integra ballet y conciertos, actualizados todas las temporadas.
Este imponente teatro fue diseñado por el arquitecto Miklós Ybl, y constituye una obra neo renacentista, quizás una de las importantes de Hungría. La historia se remonta al año 1875, y finalizó en 1894.
La iniciativa provino del emperador de Austria, Francisco José I y su mujer, la emperatriz Sissi, cuya intención era que ésta no sobrepasara la majestuosidad de la ópera de Viena.
Sissi, disfrutaba veladas inolvidables en la ópera, y hasta tenía su propio palco exclusivo solo para ella.
Sin embargo, para la época fue dispuesta con 2400 asientos. Hoy día, y para evitar esta rivalidad posee la mitad del aforo.
Su construcción, fue perfectamente recreada para dar vida a una de las acústicas del mundo, gracias a su espectacular forma de herradura, en donde puedes disfrutar con las mejores piezas de música clásica a manos de la Orquesta Filarmónica de Budapest.
En el exterior del edificio, se puede apreciar obras de arte y esculturas de los más famosos músicos y compositores de música clásica de todos los tiempos, y de Hungría. También como Frank Listz y Ferenc.
Muchos prefieren la fachada del edificio de Viena, pero este teatro también merece una especial atención.
Las visitas guiadas a la ópera de Budapest
Debes tener en cuenta que para hacer este recorrido existen varias opciones. La primera y la más recomendada es una visita guiada y la segunda comprando los las entradas en las web oficiales que han sido dispuestas para tal fin.
En las visitas guiadas estarás sujeto al horario de la función que hayas seleccionado. Personalmente, ambas opciones son geniales pues luego de la visita guiada puedes ir a una función, ya que los precios son subvencionados y por lo tanto, un asiento no te debería costar más de 3 euros.
El único problema se presenta si vas en una época que no sea de verano. En esta época los artistas descansan y lo único que está disponible para los viajeros son las visitas guiadas.
Con la opción de la visita guiada, pagareis un poco más de 10 euros, pero es una elección muy completa, pues tendréis información detallada y habrá valido la pena visitar la ópera de Budapest.
Al momento de entrar, lo primero que encontrarás será el vestíbulo, en donde hay algunas pinturas murales en la bóveda.
En seguida, verás la tienda en donde se adquieren las entradas, y solo debéis chequear el horario de las visitas en el idioma español.
Por lo general, entre las 15 y 16 horas están planificadas las visitas en español. Debes estar allí con antelación sobre todo en verano donde concurren muchísimas personas.
Cabe destacar que la cafetería no funciona en verano, por lo que si necesitáis alguna bebida o tentempié tendrás que esperar hasta finalizar el tour. O bien luego te puedes ir a dar una vuelta por Budapest para disfrutar de sus cafés.
La decoración es impecable, todo lo que encontrás al paso está pulido y perfectamente dispuesto, como si el tiempo estuviera detenido en un solo lugar.
La visita comienza al subir las escaleras, cuya alfombra roja es digna de los mejores espectáculos de la realeza.
A medida que vas subiendo, notareis detalles preciosos como las lámparas de araña en el techo, el escenario, la sala de descanso y los palcos.
En la zona de los palcos, encontrareis el imponente palco real. Allí se encuentran 4 esculturas que representan a los cuatro tipos de voces de ópera: soprano, contralto, bajo y tenor.
Pagando un precio adicional no mayor a 2 euros tendrás la opción que una cantante al final de la visita te cante una piezas de ópera, con su colorido y tradicional traje, algo así como una especie de mini concierto. Sin embargo, no lo hace en el escenario.
Igualmente, no descartes la opción de adquirir una Budapest Card. Con ella tendrás descuentos en los mejores museos y sitios turísticos de interés, así como en el sistema de transporte público.
Comprar entradas para la ópera
La opción de adquirir entradas es también una de las más populares.
El primer paso es chequear el itinerario de los espectáculos, ya que en verano descansa el teatro.
Las funciones que más se repiten sobre todos los fines de semana son la ópera y el ballet, pues son las más solicitadas.
Piezas de teatro ballet clásicas como Don Quijote, Espartaco, El lago de los Cisnes, Otello y muchos más son exhibidos durante todo el año. En la época navideña, la sala de escenarios se llena de galas y luces con los mejores conciertos navideños a cargo de la Orquesta Sinfónica de Budapest.
De igual forma, los boletos para los conciertos de año puedes adquirirlos con bastante antelación.
Los conciertos que se ofrecen en las principales iglesias de Budapest también puedes verlo en los cronogramas generales de la página oficial de la ópera. Como por ejemplo, los ofrecidos en la Iglesia de St. Anne. Obras de genios musicales como Vivaldi, Mozart y Schubert.
Los tickets varían en coste de acuerdo a la visibilidad. Las entradas con ubicación en los laterales son los más económicos. Los frontales aunque son más caros, no alcanzan los 10 euros.
Seas amante de la opera o no, si estás en Hungría no dejes de visitar la ópera de Budapest. Si no vas te perderás una experiencia cultural inolvidable y única en su estilo.
Recuerda, que unos pocos euros que podáis ahorrar pueden serviros para disfrutar algún otro espectáculo precioso, de esta bellísima ciudad llena de cultura, arte y música.
